lunes, 5 de octubre de 2015

Estoy hablando de escribir mentiras


La cosa está buena para el próximo puente en Guatapé. Estaremos compartiendo pantalla con pesos pesados. Productos que han estado en la Berlinale, por ejemplo ( a nivel largometrajes). Con gente que ha decidido tomarse el cine en serio.





¿Cómo hemos logrado filtrar a ES DOMINGO en este festival? En honor a la verdad, el corto lo ha logrado a media máquina, con un borrador de película, siendo honestos. Las copias enviadas a festivales, han sido copias de copias de copias.

Esperamos que podamos depurar el material y pasar del boceto a un master más decente. Creemos que ES DOMINGO tendrá más fuerza de la que ya tiene.

Aquí unos bocados de la selección en la que nos hemos dado el honor de estar. Según leo, la proyección será en un barco, rodeados por el agua de una represa y por la oscuridad de la noche. No sé qué clase de imagen podrá ser ésa y qué clase de fiesta podrá derivar ver cine en un braco, pero a mí me luce muy potente el tema.

En tiempos de corrección política, ya sabemos a lo que vamos y a lo que nos enfrentamos. A la sensibilidad extrema por las historias de los vulnerables, las historias honestas que creen demasiado en el ser humano, porque Latinoamérica es la última esperanza que le queda a este mundo.

Nosotros, en cambio, vamos con otra propuesta. Ni siquiera tan honesta, ni tan optimista, aunque ES DOMINGO da la ilusión de ser la más sincera.

Para empezar yo, el escritor del guión, ni siquiera creo que un hombre necesite de una mujer para ser ordenado o para vivir dignamente, como está planteado en la película. Puedo caer en esa trampa en la esfera de la ficción, pero no en la vida real. Puede ser posible que las culturas machistas seamos un poco así. Pero no me creo al personaje, ése que escribí. Hace años que no me  creo nada de lo que escribo. Pienso que la gente que se cree lo que escribe se convierten en muy buenos redactores, periodistas quizás, pero muy malos escritores artísticamente hablando, y no estoy hablando de escribir fantasía: estoy hablando de escribir mentiras.

Tal vez por ello, siga sin entender esa preocupación del cine nuestro por lo real en el sentido más bajo del término. Pongo como ejemplo la película Tierra en la Lengua, de Rubén Mendoza, una película que vi hace poco, tal vez la última película de cine colombiano que vea este año. Uno la ve a Tierra en la Lengua y no entiende cómo el Estado se puede gastar la plata subvencionando este tipo de obras. Uno piensa que es un despilfarro del erario público sinceramente, plata que podría estar mejor invertida en mejorar las carreteras sin ir muy lejos.  No voy a explicarme. Solamente decir que los colombianos somos mejor y que el cine también sirve para mostrar lo posible.

Pero vuelvo la tema. ES DOMINGO es una historia farsante, pero juguetona. No dice la verdad, pero la gente se ríe. Se enamora y paradójicamente sale del teatro un poco más ilusionado con la vida. Con suerte, nos irán a medir en relación con nuestros competidores de acuerdo a ese rasero.

Aquí la programación del FESTIVAL DE CINE DE ORIENTE




Eskwe means hummingbird from Paola Ochoa on Vimeo.

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